Llevar amatista, cuarzo rosado y ónix puede ser una poderosa fuente de empatía y conexión emocional. La amatista, al proporcionar serenidad y promover la conexión con uno mismo, nos ayuda a comprender y compartir los sentimientos de los demás. El cuarzo rosado, con su compasión y capacidad para promover la armonía, nos permite abrir nuestros corazones y brindar apoyo a quienes nos rodean. Por su parte, el ónix, al ofrecer protección y estabilidad, nos permite mantenernos firmes en nuestros valores mientras nos conectamos con la experiencia de los demás. Con esta combinación de cristales, cultivaremos una empatía genuina y profunda, construyendo relaciones basadas en la comprensión y el apoyo mutuo. 🌿💖🖤
